Son las 9:10 pm de un martes por la noche. Los Residents han convertido al lunario en una sala de estar para contarte una serie de historias bizarras, verdades ocultas y demonios internos invisibles. Sólo son necesarios unos sintetizadores, guitarra y una voz para llenar todo el espacio sonoro. Luces, humo y videos complementan el espectro, aunque realmente es el carácter racional o sensible del espectador lo que integra la ambientación al interior de su cabeza. Durante casi dos horas, los tres miembros de la banda dan alarde de su locura para crear ambientaciones sensoriales completas que afectan de alguna u otra manera a cada uno de los espectadores. La luz que habla, la vieja señora, el fantasma de Red o las personas espejos. Todas las historias son contadas por Randy, un abuelo que hipnotiza con su voz a la audiencia y nos empuja hacia su obscuro mundo de pesadillas, sueños, demonios, fantasmas y fantasías. Chuck y Bob, vestidos de negro con un traje de frac rojo brillante, sin caras, con rastas y unos lentes submarinos, se encargan de entonar el obscuro mundo donde se desarrollan estas historias.
Así empezó el festival Aural, el heredero de Radar, espacio para la música experimental del Festival de México (FMX), sin duda una de las mejores propuestas que hay en nuestro país en cuanto a experimentación sonora se refiere. Boredoms, Zu, Mike Patton y Painkiller han sido sólo algunas de las personalidades que han compuesto este festival en sus pasadas ediciones. Siempre hay grandes sorpresas y todas valen la pena. Este año se ve que mantendran la calidad a la que nos han acostumbrado. Sólo espero que en esta edición no nos sorprendan con alguna mamada tipo Fat Mariachi que empaña la gran calidad de este festival y de paso da la idea de que en México no hay talento... En fin, se las dejamos pasar!
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